Denuncian que cargos afines al PP adjudicarán los cañones de nieve de Alto Campoo
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David Laguillo
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- Según La Unión no intervendrán funcionarios públicos
- Sebrango apunta a la empresa del alcalde del PP de Ramales, José Domingo San Emeterio (Copsesa)
La formación política LA UNIÓN (LU) anunció este jueves que el “Nuevo Concurso de los 11 Millones”, publicado el miércoles en el Boletín Oficial de Cantabria, destinado a dotar a Alto Campoo de Cañones de Nieve,“va a ser adjudicado a quien interese en la Ejecutiva del PP de Cantabria”, pues se ha diseñado para adjudicarle “a través de una empresa pública plagada de afiliados del PP”, y además “sólo decidido a través de subjetividades, sin importar el precio de licitación”.
Rafael Sebrango, presidente de la formación, acusó así al Gobierno de Cantabria de “organizar un millonario concurso, cuidándose de que ningún funcionario público intervenga”, y además “desechando criterios objetivos”, lo cual, añadió “permite que siguiéndose por gustos y caprichos, se verifique la adjudicación”.
Cualquier decisión del concurso “puede vestirse de manera fácil”, y por ello, afirmó que “Es evidente que todas las papeletas de adjudicación están en la mano de la empresa del Alcalde del PP de Ramales”, advirtió.
El nuevo concurso se convoca al ser anulado el anterior por el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales, cuando ya había sido adjudicado a Copsesa, la constructora del Alcalde del PP de Ramales, José Domingo San Emeterio.
“Un concurso de una cantidad tan importante de dinero, no puede ser organizado por una empresa pública”, defienden desde LA UNIÓN (LU).
Este concurso, es organizado por Cantur, la empresa pública dependiente del Gobierno de Cantabria, por lo que “va a ser resuelto por personal de confianza del PP, no por funcionarios públicos sometidos a la Ley”.
Además, según los datos del Pliego de Bases Técnicas, “ni siquiera está fijado el número de cañones de nieve a instalar, depende todo del licitador”.
De hecho, indicó Sebrango, “todo el proyecto será a propuesta de los licitadores, propondrán el número de cañones, su ubicación, y el resto de elementos de la instalación”.
“Esto quiere decir”, prosiguió “que el criterio de adjudicación va a ser absolutamente subjetivo y caprichoso”, y alertó “la adjudicación no va a ser por ahorro de dinero público, sino que se justificará en el por qué gusta más el proyecto del agraciado, aunque resulte más caro”.
Bajo estas condiciones “la adjudicación será para el Alcalde del PP, compañero de los que deciden el concurso, que son afiliados puestos a dedo a dirigir Cantur”.
Además, el nuevo concurso ofrece una novedad “sujeta al capricho, no a datos objetivos”, y es que los licitadores ahora podrán ofrecer una variante y no atenerse a que sean dos las balsas que almacenen el agua”.
Con la posibilidad de esta novedosa variante “se aumentan las posibilidad de la discrecionalidad”.
LA UNIÓN (LU) ya se ha mostrado contraria al proyecto, por entender que es ‘un despilfarro’, ya que se financia mediante la creación de deuda pública, habiendo ya propuesto que los 11 millones se destinen a la reindustrialización.
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