• 10 de diciembre de 2024

Descubren en El Soplao unas bacterias fosilizadas, únicas en el mundo, que vivieron hace un millón de años

El equipo de investigación liderado por el investigador del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), Rafael Lozano, ha descubierto en la cueva de El Soplao (Cantabria) un tipo de estromatolito completamente desconocido hasta la fecha. Según informa el gobierno de Cantabria, estas bacterias fosilizadas formaron un tipo de estromatolitos completamente desconocido hasta la fecha, puesto que están formados principalmente por óxidos de manganeso y no por carbonato cálcico, como es habitual en estas formas de vida. La inusual y excelente conservación de estas bacterias fósiles ha permitido justificar el origen biológico de estos materiales. Formas de vida similares aparecen en el registro fósil desde hace 3.500 millones de años y representan la evidencia más antigua de vida que se conoce en la Tierra. «Siempre he confiado y declarado que el territorio Soplao era un vivero de nuevas y buenas noticias, y este importante hallazgo es un claro ejemplo de lo que nos puede deparar los estudios que se están realizando en esta cavidad única en el mundo», ha afirmado el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Francisco Javier López Marcano.

Los estromatolitos, del griego ‘stroma’ (alfombra, cama) y ‘lithos’ (piedra), son rocas formadas por láminas de carbonatos como resultado de la actividad metabólica de microorganismos; cianobacterias y algas cianofíceas, principalmente. Uno de los ejemplos vivos más conocidos de estas «rocas biológicas» los podemos ver en las costas occidentales de Australia, pero aparecen en el registro fósil desde hace 3.500 millones de años y representan a las primeras evidencias de vida en la Tierra.

Sin embargo, las bacterias que han dado lugar a este hallazgo, publicado en el último número de la revista científica ‘Geology’, no han construido el edificio estromatolítico como resultado de la fotosíntesis, dado que se han formado en una cueva y en ausencia total de luz. «Estos domos de roca, que se formaron hace más de 1 millón de años en un antiguo río subterráneo que hoy está prácticamente inactivo, están formados principalmente por óxidos de manganeso, que son negros, y no por carbonato cálcico, como es habitual en estas formas de vida», ha explicado Lozano. «Aunque, quizás, ese mismo color oscuro en un espacio sin luz como ese, ha podido ser la razón de que hayan pasado inadvertidos hasta el momento», ha apuntado Lozano. El manganeso disuelto en el agua del río fue aprovechado por un tipo especial de microbios. Unas bacterias capaces de oxidar el manganeso y que estaban adaptadas a vivir en un medio tan hostil como ese, donde no había luz y la disponibilidad de nutrientes era muy escasa. «Se trata de unos organismos «quimiosintéticos»», ha explicado Carlos Rossi, profesor titular de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y miembro del equipo del IGME, «ya que para sintetizar su materia orgánica utilizaban una reacción química (la oxidación del manganeso), en lugar de la luz como hacen los organismos fotosintéticos», ha continuado.

 

David Laguillo

David Laguillo

https://www.cantabriadiario.com

David Laguillo (Torrelavega, 1975) es un periodista, escritor y fotógrafo español. Desde hace años ha publicado en medios de comunicación de ámbito nacional y local, tanto en publicaciones generalistas como especializadas. Como fotógrafo también ha ilustrado libros y artículos periodísticos. Más información en https://www.davidlaguillo.com/biografia

.